No sabía donde lo puse,
había perdido el amar;
y un día de octubre
lo volví a encontrar.
En seguida lo supe,
de tus ojos al mirar,
que mi vida la lumbre
guardabas al besar.
Y sin quererlo entender,
sin buscarle un por que,
te siento así sin pensar.
Y mi corazón se fue,
se me perdió, otra vez,
a través de este amar.