Abriste la puerta al recuerdo
de aquello que creí olvidar,
memorias tan lejanas trajiste,
que apenas las puedo evocar.
Elevando la voz a mis dioses
busco una imagen inmortal,
más sólo observo un tiempo
oscuro, vacío y espectral.
Asomaste la luz de un pasado
que sólo me pudo marcar
la piel y el alma con destellos
que yo decidí no recordar.
Pero que aún puedo sentir…